Post by Admin on Nov 30, 2023 3:01:25 GMT
¿Qué del milenio? (2ª parte)
Cuando reconocemos que Isaías 62 se está dibujando directamente sobre Isaías 40, esto significa que en realidad, la venida del Señor de Isaías 62, la venida del Hijo del Hombre en Mateo 16:27-28, también fue el día del Señor anunciado por Juan el bautista como Elías, la voz y el mensajero, y él dijo que el juicio estaba a la mano:
Mateo 3:7
Al ver él que muchos de los fariseos y de los saduceos venían a su bautismo, les decía: ¡Generación de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera (NVI - del castigo que se acerca, iNT Cevallos+ - de la ira que está a punto de venir, JER - de la ira inminente, AMP - de la ira y la indignación [de Dios contra la desobediencia] que se avecina)?
Estas conexiones a su vez significan que la venida del Hijo del Hombre en Mateo 25:31-33 es la misma venida del Hijo de la que habló Jesús, para ser el cumplimiento de Isaías 40 e Isaías 62. Esto se sigue lógicamente, ya que se admite que la venida del Señor de Mateo 25:31-33 es la parusía de Cristo para la boda, como se establece en Mateo 25:1-13.
Mateo 25:1-13, 31-33
1 Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al esposo. 2 Cinco de ellas eran prudentes y cinco insensatas. 3 Las insensatas, tomando sus lámparas, no tomaron consigo aceite; 4 mas las prudentes tomaron aceite en sus vasijas, juntamente con sus lámparas. 5 Y tardándose el esposo, cabecearon todas y se durmieron. 6 Y a la medianoche se oyó un clamor: ¡Aquí viene el esposo; salid a recibirle! 7 Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron, y arreglaron sus lámparas. 8 Y las insensatas dijeron a las prudentes: Dadnos de vuestro aceite; porque nuestras lámparas se apagan. 9 Mas las prudentes respondieron diciendo: Para que no nos falte a nosotras y a vosotras, id más bien a los que venden, y comprad para vosotras mismas. 10 Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta. 11 Después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: ¡Señor, señor, ábrenos! 12 Mas él, respondiendo, dijo: De cierto os digo, que no os conozco. 13 Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir… 31 Cuando el Hijo del Hombre venga en Su gloria, y todos los santos ángeles con Él, entonces se sentará en Su trono de gloria, 32 y serán reunidas delante de Él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. 33 Y pondrá las ovejas a Su derecha, y los cabritos a Su izquierda.
Por lo tanto:
La venida de Cristo en Mateo 25:31-33 es la venida del Señor para la boda.
La venida del Señor para la boda fue predicha por Isaías 62:11, que predijo la venida del Señor en juicio ‘he aquí Su recompensa con Él’.
Pero, la venida del Señor para la boda, en cumplimiento de Isaías 62, fue la venida del Señor de Mateo 16:27-28, que iba a ser en la generación del primer siglo.
Por lo tanto, la venida del Señor de Mateo 25:31-33 para la boda debía ser en la generación del primer siglo.
Entonces podemos ofrecer un argumento ligeramente modificado basado en Isaías 40:
La venida del Señor de Mateo 25:31-33 es la venida del Señor en juicio, recompensa, el reino y la boda.
Isaías 40 es una predicción de la venida del Señor en el juicio, la recompensa y el reino: (v.10 ‘Su brazo señoreará; he aquí que Su recompensa viene con Él’).
La venida del Señor en juicio, recompensa y el reino debía ser anunciado por Juan el bautista como la voz de uno que clama en el desierto.
Juan, como la voz, dijo la venida del Señor en juicio, la recompensa y el reino estaba cerca.
Por lo tanto, la venida del Señor de Mateo 25:31-33, la venida del Señor en el juicio, la recompensa y el reino fue la venida del Señor anunciado por Juan el bautista y fue inminente en el primer siglo.
Por lo tanto, la delimitación temporal de Juan, como la voz y el mensajero (y Elías), al postular que el reino y el juicio vendrían pronto, se combinó con la declaración de Jesús de que el juicio y el reino anticipados serían en esa generación del primer siglo sirve como prueba definitiva e irrefutable de que el día del Señor, la venida del Señor en el juicio y el reino, la venida del Señor de Mateo 25:31-33 iba a ser en el primer siglo.
Finalmente, observemos las conexiones de todos estos pasajes con Apocalipsis.
Jesús dijo:
Apocalipsis 22:12
He aquí yo vengo pronto, y mi galardón (LBLA - recompensa) conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.
Al igual que con Mateo 16:27-28, este pasaje es un eco directo de Isaías 40 e Isaías 62 y la promesa de la venida del Señor en el juicio y el reino y ‘Su recompensa viene con Él’. Significativamente, las únicas dos profecías mesiánicas de la venida del Señor ‘Su recompensa con Él’ son Isaías 40 y 62.
Y las únicas dos menciones en el Nuevo Testamento de la venida del Señor ‘Su recompensa viene con Él’ son Mateo 16:27 y Apocalipsis 22:12, los cuales contienen declaraciones enfáticas de la cercanía de esa venida. (Claramente, hay más pasajes que hablan de que Cristo viene en juicio, pero la terminología de ‘mi recompensa conmigo’ / ‘Su recompensa con Él’, etc. es distintiva).
¿Es esta venida del Señor y su recompensa con Él en Apocalipsis 22 una venida diferente del Señor de la que Jesús predijo en Mateo 16:27-28? ¿Es esta venida del Señor con Su recompensa en Apocalipsis 22 una venida totalmente diferente del Señor en juicio, en el reino, de eso predicho en Isaías 40 e Isaías 62?
Ya hemos establecido que la venida del Señor en Mateo 16:27 es la venida del Señor en el juicio y el reino de Isaías 62, la venida del Señor para la boda. Dado que la venida del Señor en Apocalipsis es Su juicio, recompensa y la boda, esto sirve como una prueba irrefutable de que la venida del Señor de Apocalipsis debía ser en el primer siglo. (Esto se establece por el hecho de que en Mateo 22:1-8 y Apocalipsis 19, la boda se postula en el momento del juicio de Jerusalén / Babilonia).
Entonces encontramos las conexiones de Isaías 62 con Mateo 16:27-28 y Apocalipsis. En Isaías 62, la venida del Señor en juicio, Su venida con Su recompensa, es el momento de la boda. Del mismo modo, en Apocalipsis, la inminente venida del Señor con su recompensa, y en el juicio, fue el momento de la boda:
Apocalipsis 19:7
7 Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.
¿Hubo dos bodas totalmente diferentes del Señor en Su venida en juicio y el reino? Esa es evidentemente una idea novedosa e insostenible. Por lo tanto, estas ‘conexiones’ se mantienen firmes.
¡Todo esto significa que el final del ‘milenio’ llegó en el primer siglo!
¿Cómo es eso?
Consideremos lo siguiente:
¿Dónde plantea Apocalipsis el momento de la salvación?
Respuesta: En la venida del Señor en juicio de Babilonia, la ciudad ‘donde también nuestro Señor fue crucificado’.
Apocalipsis 11:8, 14:8
11:8 Y sus cadáveres estarán en la plaza de la grande ciudad que en sentido espiritual se llama Sodoma y Egipto, donde también nuestro Señor fue crucificado… 14:8 Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación.
Apocalipsis 19:1-3
1 Después de esto oí una gran voz de gran multitud en el cielo, que decía: ¡Aleluya! Salvación y honra y gloria y poder son del Señor Dios nuestro; 2 porque sus juicios son verdaderos y justos; pues ha juzgado a la gran ramera que ha corrompido a la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus siervos de la mano de ella. 3 Otra vez dijeron: ¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos.
¿Dónde plantea Apocalipsis el tiempo del reino?
Respuesta: Al mismo tiempo: En la venida del Señor en juicio de Babilonia.
Apocalipsis 11:15-19
15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de Su Cristo; y Él reinará por los siglos de los siglos. 16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios, 17 diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado. 18 Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra. 19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.
¿Dónde plantea Apocalipsis el momento de la boda?
Respuesta: En la venida del Señor en el juicio de Babilonia.
Apocalipsis 19:6-7
6 Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de grandes truenos, que decía: ¡Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina! 7 Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y Su esposa se ha preparado.
¿Dónde plantea Apocalipsis el tiempo del juicio y, por lo tanto, la parusía y la boda?
Respuesta: Al final del ‘milenio’.
Apocalipsis 20:7, 10-15, 21:1-3
20:7 Cuando los mil años se cumplan, Satanás será suelto de su prisión… 10 Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos. 11 Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. 12 Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras. 13 Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras. 14 Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. 15 Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego… 21:1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más. 2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido. 3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y Él morará con ellos; y ellos serán Su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como Su Dios.
Para decir esto de manera breve y concisa:
El momento del juicio, la resurrección, la boda y el reino están al final del ‘milenio’.
Pero la venida del Señor en el juicio era inminente, estaba a la mano, próxima, en breve y rápidamente cuando Juan escribió Apocalipsis.
Apocalipsis 22:10-12
10 Y me dijo: No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca (NVI - No guardes en secreto las palabras del mensaje profético de este libro, porque el tiempo de su cumplimiento está cerca, Wuest´s NT - porque el tiempo estratégico, trascendental es inminente). 11 El que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía; y el que es justo, practique la justicia todavía; y el que es santo, santifíquese todavía. 12 He aquí yo vengo pronto (Wuest’s NT - estoy viniendo pronto, AMP, Young’s LT - vengo rápidamente), y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.
Por lo tanto, la hora del juicio, la resurrección, la boda y el reino al final del milenio, era inminente, estuvo cerca, próxima, pronta, en breve y rápidamente, cuando Juan escribió Apocalipsis.
Y un pensamiento más como cierre sobre esto:
El tiempo de la resurrección, la recompensa de los muertos y la destrucción de los enemigos de Dios es el final del ‘milenio’. (Apocalipsis 20:7, 10-15, 21:1-3)
Pero, el tiempo de la resurrección, la recompensa de los muertos y la destrucción de los enemigos de Dios ocurre en el juicio de la ciudad donde el Señor fue crucificado:
Apocalipsis 11:8, 15-19.
11:8 Y sus cadáveres estarán en la plaza de la grande ciudad que en sentido espiritual se llama Sodoma y Egipto, donde también nuestro Señor fue crucificado… 15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y Él reinará por los siglos de los siglos. 16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios, 17 diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado. 18 Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra. 19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.
Por lo tanto, el final del ‘milenio’ ocurrió en el juicio de la ciudad donde el Señor fue crucificado.
Por supuesto, los detractores y objetores nos dicen que ‘Dios no ve el tiempo como el hombre’, por lo que ‘todas estas conexiones con sus indicadores de tiempo no pueden tomarse al pie de la letra’.
Pero tales afirmaciones hacen una burla del lenguaje y el deseo y la capacidad de Dios para comunicarse sinceramente con Su creación.
El hecho es que Dios puede decir el tiempo perfectamente y siempre ha comunicado con sinceridad al hombre cuando habló del momento de los acontecimientos.
Cuando dijo que algo estaba cerca, estaba cerca cuando el hombre ve ‘cerca’. Cuando dijo que algo ‘no estaba cerca’, eso significaba que ‘no estaba cerca’, ya que el hombre entiende lo que es la cercanía.
Todos los intentos de ignorar, mitigar y negar las declaraciones temporales de Dios son una negación de Su verdad. Por lo tanto, ¡y es el colmo de la arrogancia cuando somos testigos de quienes alguna vez creyeron en la Escatología de Pactos se burlen, literalmente con escarnio, de cualquier apelación a las declaraciones de estos tiempos!
Podemos ver cuán poderosas son realmente estas ‘conexiones’. Hemos mostrado cómo dos profecías clave del Antiguo Testamento de la venida del Señor en juicio, recompensa y el reino, sirven como fuente para el ministerio de Juan el bautista, para la predicción de Jesús de Su venida en Su reino, para el tiempo de Su venida para la boda, y el fin del milenio.
Las conexiones son claras y son innegables. Y nos muestran la verdad de la escatología bíblica.
Extracto de mi libro '¿Qué del milenio?' (Páginas 11-22)
Si se encuentra en los US, Canadá, Europa, UK o Australia puede ver todos nuestros libros en: www.lulu.com/es/spotlight/rubenmm
Cuando reconocemos que Isaías 62 se está dibujando directamente sobre Isaías 40, esto significa que en realidad, la venida del Señor de Isaías 62, la venida del Hijo del Hombre en Mateo 16:27-28, también fue el día del Señor anunciado por Juan el bautista como Elías, la voz y el mensajero, y él dijo que el juicio estaba a la mano:
Mateo 3:7
Al ver él que muchos de los fariseos y de los saduceos venían a su bautismo, les decía: ¡Generación de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera (NVI - del castigo que se acerca, iNT Cevallos+ - de la ira que está a punto de venir, JER - de la ira inminente, AMP - de la ira y la indignación [de Dios contra la desobediencia] que se avecina)?
Estas conexiones a su vez significan que la venida del Hijo del Hombre en Mateo 25:31-33 es la misma venida del Hijo de la que habló Jesús, para ser el cumplimiento de Isaías 40 e Isaías 62. Esto se sigue lógicamente, ya que se admite que la venida del Señor de Mateo 25:31-33 es la parusía de Cristo para la boda, como se establece en Mateo 25:1-13.
Mateo 25:1-13, 31-33
1 Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al esposo. 2 Cinco de ellas eran prudentes y cinco insensatas. 3 Las insensatas, tomando sus lámparas, no tomaron consigo aceite; 4 mas las prudentes tomaron aceite en sus vasijas, juntamente con sus lámparas. 5 Y tardándose el esposo, cabecearon todas y se durmieron. 6 Y a la medianoche se oyó un clamor: ¡Aquí viene el esposo; salid a recibirle! 7 Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron, y arreglaron sus lámparas. 8 Y las insensatas dijeron a las prudentes: Dadnos de vuestro aceite; porque nuestras lámparas se apagan. 9 Mas las prudentes respondieron diciendo: Para que no nos falte a nosotras y a vosotras, id más bien a los que venden, y comprad para vosotras mismas. 10 Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta. 11 Después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: ¡Señor, señor, ábrenos! 12 Mas él, respondiendo, dijo: De cierto os digo, que no os conozco. 13 Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir… 31 Cuando el Hijo del Hombre venga en Su gloria, y todos los santos ángeles con Él, entonces se sentará en Su trono de gloria, 32 y serán reunidas delante de Él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. 33 Y pondrá las ovejas a Su derecha, y los cabritos a Su izquierda.
Por lo tanto:
La venida de Cristo en Mateo 25:31-33 es la venida del Señor para la boda.
La venida del Señor para la boda fue predicha por Isaías 62:11, que predijo la venida del Señor en juicio ‘he aquí Su recompensa con Él’.
Pero, la venida del Señor para la boda, en cumplimiento de Isaías 62, fue la venida del Señor de Mateo 16:27-28, que iba a ser en la generación del primer siglo.
Por lo tanto, la venida del Señor de Mateo 25:31-33 para la boda debía ser en la generación del primer siglo.
Entonces podemos ofrecer un argumento ligeramente modificado basado en Isaías 40:
La venida del Señor de Mateo 25:31-33 es la venida del Señor en juicio, recompensa, el reino y la boda.
Isaías 40 es una predicción de la venida del Señor en el juicio, la recompensa y el reino: (v.10 ‘Su brazo señoreará; he aquí que Su recompensa viene con Él’).
La venida del Señor en juicio, recompensa y el reino debía ser anunciado por Juan el bautista como la voz de uno que clama en el desierto.
Juan, como la voz, dijo la venida del Señor en juicio, la recompensa y el reino estaba cerca.
Por lo tanto, la venida del Señor de Mateo 25:31-33, la venida del Señor en el juicio, la recompensa y el reino fue la venida del Señor anunciado por Juan el bautista y fue inminente en el primer siglo.
Por lo tanto, la delimitación temporal de Juan, como la voz y el mensajero (y Elías), al postular que el reino y el juicio vendrían pronto, se combinó con la declaración de Jesús de que el juicio y el reino anticipados serían en esa generación del primer siglo sirve como prueba definitiva e irrefutable de que el día del Señor, la venida del Señor en el juicio y el reino, la venida del Señor de Mateo 25:31-33 iba a ser en el primer siglo.
Finalmente, observemos las conexiones de todos estos pasajes con Apocalipsis.
Jesús dijo:
Apocalipsis 22:12
He aquí yo vengo pronto, y mi galardón (LBLA - recompensa) conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.
Al igual que con Mateo 16:27-28, este pasaje es un eco directo de Isaías 40 e Isaías 62 y la promesa de la venida del Señor en el juicio y el reino y ‘Su recompensa viene con Él’. Significativamente, las únicas dos profecías mesiánicas de la venida del Señor ‘Su recompensa con Él’ son Isaías 40 y 62.
Y las únicas dos menciones en el Nuevo Testamento de la venida del Señor ‘Su recompensa viene con Él’ son Mateo 16:27 y Apocalipsis 22:12, los cuales contienen declaraciones enfáticas de la cercanía de esa venida. (Claramente, hay más pasajes que hablan de que Cristo viene en juicio, pero la terminología de ‘mi recompensa conmigo’ / ‘Su recompensa con Él’, etc. es distintiva).
¿Es esta venida del Señor y su recompensa con Él en Apocalipsis 22 una venida diferente del Señor de la que Jesús predijo en Mateo 16:27-28? ¿Es esta venida del Señor con Su recompensa en Apocalipsis 22 una venida totalmente diferente del Señor en juicio, en el reino, de eso predicho en Isaías 40 e Isaías 62?
Ya hemos establecido que la venida del Señor en Mateo 16:27 es la venida del Señor en el juicio y el reino de Isaías 62, la venida del Señor para la boda. Dado que la venida del Señor en Apocalipsis es Su juicio, recompensa y la boda, esto sirve como una prueba irrefutable de que la venida del Señor de Apocalipsis debía ser en el primer siglo. (Esto se establece por el hecho de que en Mateo 22:1-8 y Apocalipsis 19, la boda se postula en el momento del juicio de Jerusalén / Babilonia).
Entonces encontramos las conexiones de Isaías 62 con Mateo 16:27-28 y Apocalipsis. En Isaías 62, la venida del Señor en juicio, Su venida con Su recompensa, es el momento de la boda. Del mismo modo, en Apocalipsis, la inminente venida del Señor con su recompensa, y en el juicio, fue el momento de la boda:
Apocalipsis 19:7
7 Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.
¿Hubo dos bodas totalmente diferentes del Señor en Su venida en juicio y el reino? Esa es evidentemente una idea novedosa e insostenible. Por lo tanto, estas ‘conexiones’ se mantienen firmes.
¡Todo esto significa que el final del ‘milenio’ llegó en el primer siglo!
¿Cómo es eso?
Consideremos lo siguiente:
¿Dónde plantea Apocalipsis el momento de la salvación?
Respuesta: En la venida del Señor en juicio de Babilonia, la ciudad ‘donde también nuestro Señor fue crucificado’.
Apocalipsis 11:8, 14:8
11:8 Y sus cadáveres estarán en la plaza de la grande ciudad que en sentido espiritual se llama Sodoma y Egipto, donde también nuestro Señor fue crucificado… 14:8 Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación.
Apocalipsis 19:1-3
1 Después de esto oí una gran voz de gran multitud en el cielo, que decía: ¡Aleluya! Salvación y honra y gloria y poder son del Señor Dios nuestro; 2 porque sus juicios son verdaderos y justos; pues ha juzgado a la gran ramera que ha corrompido a la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus siervos de la mano de ella. 3 Otra vez dijeron: ¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos.
¿Dónde plantea Apocalipsis el tiempo del reino?
Respuesta: Al mismo tiempo: En la venida del Señor en juicio de Babilonia.
Apocalipsis 11:15-19
15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de Su Cristo; y Él reinará por los siglos de los siglos. 16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios, 17 diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado. 18 Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra. 19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.
¿Dónde plantea Apocalipsis el momento de la boda?
Respuesta: En la venida del Señor en el juicio de Babilonia.
Apocalipsis 19:6-7
6 Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de grandes truenos, que decía: ¡Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina! 7 Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y Su esposa se ha preparado.
¿Dónde plantea Apocalipsis el tiempo del juicio y, por lo tanto, la parusía y la boda?
Respuesta: Al final del ‘milenio’.
Apocalipsis 20:7, 10-15, 21:1-3
20:7 Cuando los mil años se cumplan, Satanás será suelto de su prisión… 10 Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos. 11 Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. 12 Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras. 13 Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras. 14 Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda. 15 Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego… 21:1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más. 2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido. 3 Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y Él morará con ellos; y ellos serán Su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como Su Dios.
Para decir esto de manera breve y concisa:
El momento del juicio, la resurrección, la boda y el reino están al final del ‘milenio’.
Pero la venida del Señor en el juicio era inminente, estaba a la mano, próxima, en breve y rápidamente cuando Juan escribió Apocalipsis.
Apocalipsis 22:10-12
10 Y me dijo: No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca (NVI - No guardes en secreto las palabras del mensaje profético de este libro, porque el tiempo de su cumplimiento está cerca, Wuest´s NT - porque el tiempo estratégico, trascendental es inminente). 11 El que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía; y el que es justo, practique la justicia todavía; y el que es santo, santifíquese todavía. 12 He aquí yo vengo pronto (Wuest’s NT - estoy viniendo pronto, AMP, Young’s LT - vengo rápidamente), y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.
Por lo tanto, la hora del juicio, la resurrección, la boda y el reino al final del milenio, era inminente, estuvo cerca, próxima, pronta, en breve y rápidamente, cuando Juan escribió Apocalipsis.
Y un pensamiento más como cierre sobre esto:
El tiempo de la resurrección, la recompensa de los muertos y la destrucción de los enemigos de Dios es el final del ‘milenio’. (Apocalipsis 20:7, 10-15, 21:1-3)
Pero, el tiempo de la resurrección, la recompensa de los muertos y la destrucción de los enemigos de Dios ocurre en el juicio de la ciudad donde el Señor fue crucificado:
Apocalipsis 11:8, 15-19.
11:8 Y sus cadáveres estarán en la plaza de la grande ciudad que en sentido espiritual se llama Sodoma y Egipto, donde también nuestro Señor fue crucificado… 15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y Él reinará por los siglos de los siglos. 16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios, 17 diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado. 18 Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra. 19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.
Por lo tanto, el final del ‘milenio’ ocurrió en el juicio de la ciudad donde el Señor fue crucificado.
Por supuesto, los detractores y objetores nos dicen que ‘Dios no ve el tiempo como el hombre’, por lo que ‘todas estas conexiones con sus indicadores de tiempo no pueden tomarse al pie de la letra’.
Pero tales afirmaciones hacen una burla del lenguaje y el deseo y la capacidad de Dios para comunicarse sinceramente con Su creación.
El hecho es que Dios puede decir el tiempo perfectamente y siempre ha comunicado con sinceridad al hombre cuando habló del momento de los acontecimientos.
Cuando dijo que algo estaba cerca, estaba cerca cuando el hombre ve ‘cerca’. Cuando dijo que algo ‘no estaba cerca’, eso significaba que ‘no estaba cerca’, ya que el hombre entiende lo que es la cercanía.
Todos los intentos de ignorar, mitigar y negar las declaraciones temporales de Dios son una negación de Su verdad. Por lo tanto, ¡y es el colmo de la arrogancia cuando somos testigos de quienes alguna vez creyeron en la Escatología de Pactos se burlen, literalmente con escarnio, de cualquier apelación a las declaraciones de estos tiempos!
Podemos ver cuán poderosas son realmente estas ‘conexiones’. Hemos mostrado cómo dos profecías clave del Antiguo Testamento de la venida del Señor en juicio, recompensa y el reino, sirven como fuente para el ministerio de Juan el bautista, para la predicción de Jesús de Su venida en Su reino, para el tiempo de Su venida para la boda, y el fin del milenio.
Las conexiones son claras y son innegables. Y nos muestran la verdad de la escatología bíblica.
Extracto de mi libro '¿Qué del milenio?' (Páginas 11-22)
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